131. A Herminia Valdés Ossa Septiembre de 1919

131. A Herminia Valdés Ossa Septiembre de 1919

J.M.J.T. Pax Christi 

Querida Gordita: Que el Espíritu del Amor sea contigo. 

Perdona no te haya contestado antes, para agradecerte tus regalitos. Nª Madrecita y Hermanitas se encuentran muy agradecidas por tus continuas limosnas. Dios no dejará de pagártelas a nombre de sus pobres carmelitas. 

He dado gracias a Dios desde el fondo de mi corazón, porque se acrecienta en ti la piedad, tan necesaria para el alma de la mujer. ¿No sientes más fervor cuando comulgas? ¿No sientes más paz y menos vacío en tu corazón? Sin duda que sí; pues si buscas a Jesús, El no se esconderá, antes al contrario, te llama y abre sus brazos divinos. Tanto tiempo sin que le hayas correspondido… 

El 11 de este mes pensé si te habrías acordado que era el aniversario de nuestra primera comunión, y yo te uní a mis oraciones. ¡Qué día tan sin nubes fue aquél! Nos preparamos lo mejor que pudimos. ¿Te acuerdas cómo apostábamos a ver quién hacía más actos por Jesús? Entonces, pienso, era yo pura; mientras ahora tengo el alma manchada con tantos pecados que, si pudiera los lavaría con mi propia sangre. Créeme que, cuando pienso que he ofendido a Dios, quien ha sido y es la Bondad misma, que me ha dado el ser y todo cuanto poseo, que ha muerto por mí en la cruz, y que se ha constituido en mi alimento en la S. hostia no puedo menos de sentir hondo pesar. Quisiera siempre haberlo amado, ya que El eternamente me amó. 

Prepara el ánimo a mi tía, para que las traigan para mi toma de Hábito. Ese día te tendré en mi corazón delante de N. Señor, y rogaré por lo que me dices (tengo curiosidad de saber qué es). ¿Fuiste al baile de las Correas? Que latas ¿no? 

Hoy entro a retiro por 10 días. Reza para que se convierta tu amiga pecadora. 

Te envío esa lista para que tú escojas -y lo mismo la Eli- para hacer para nuestra capilla. 

No te escribo más, porque no tengo tiempo. A Dios. Sigue ofreciéndole todo lo que haces en el día, pues así tienes mérito. 

Saludos cariñosos para mis tíos tan queridos, para los niños y un abrazo a la Eli, a quien le dirás que le tenía una carta escrita, y un perro la rompió. Creo que después del retiro, si puedo, le escribiré. Y tú, hermanita querida, recibe, junto con mis oraciones el cariño de tu indigna 

Teresa de Jesús, Carmelita 

Saludos a la Juana y Elvira