163. A su madre 23 de marzo de 1920

163. A su madre 23 de marzo de 1920

J.M.J.T. Pax Christi 

Convento del Espíritu Santo, 

marzo 23 de 1920 

Señora Lucía Solar de Fernández 

Mi querida mamachita: Que la gracia del Espíritu Santo sea en su alma consolándola. 

Hace unos momentos ha llegado el telegrama con la muerte de mi tío Eugenio, y nuestra Madrecita me ha dado licencia para trasladarme a su lado para consolarla. Al mismo tiempo que siento la muerte de este tío tan querido, no he podido menos de darle gracias a N. Señor porque oyó nuestras oraciones y se lo llevó bien preparado. Créame, mi mamacita, que siempre esperé y confié en que moriría con todos los Sacramentos, porque no abandonó jamás su escapulario del Carmen. Además, ¡cómo lo habrá asistido con sus ruegos mi tatacito! También es cierto que Dios jamás desoye el ruego incesante que se le dirige cuando se trata de la salvación de un alma. Nada sé si tuvo el consuelo de comulgar con los suyos. Mucho hemos rogado por esto. Sin embargo, si Dios no se lo ha otorgado, ha sido para purificarlo más. 

Nuestra Madrecita y Hermanitas han rezado mucho por él, y cuente que no sólo tendrá mi Comunión, sino que también la de ellas. 

A mi tía Juanita dígale que también la acompaño en su pena y que, como estamos en Cuaresma, no le escribo. En fin, mi mamachita linda, no podrán menos de darle gracias a Dios que todos sus hermanos y la familia entera ha muerto con todos los auxilios de la Religión. Esto es sólo recompensa de la educación tan cristiana que les dieron mis abuelitos. Su carmelita esta noche, desde su pobre celdita, llora con Ud. y le pide a N. Señor la consuele y le diga aquello que ella no puede expresarle por la pena y el cariño que experimenta en estos instantes 

A la Marra Cáceres salúdela de mi parte y dígale cuánto la he recordado. 

A Dios. Felices los que van a gozar de El. Vivamos en Dios muy unidas. Las abraza y besa mil veces su carmelita, que tanto la quiere. Su 

Teresa de Jesus, Carmelita.

Saludos para todos.